Cómo utilizar downlights direccionables. Lo mejor de utilizar un downlight direccionable para proporcionar luz reflejada en vez de un downlight vertical, es que el primero puede tener diversas funciones en tu configuración de iluminación.
Una luz direccional rebota en la pared hacia el espacio. Ésta es, de lejos, la manera más sutil de iluminar una habitación. Pero también puedes usar este tipo de iluminación para resaltar objetos como cuadros, esculturas o detalles arquitectónicos. Este modo de iluminar un espacio es mucho más recomendable que simplemente distribuir lámparas halógenas en el techo.
Elige una lámpara empotrable con un alojamiento profundo y a ser posible con fondo negro, ya que así minimizaremos los destellos. Existen modelos redondos, cuadrados y ovalados, aunque el primero es el más popular y el que se mezcla más fácilmente con el entorno. Cuidado con las formas cuadradas y ovaladas, ya que pueden resultar un foco de distracción. Mejor reservar estos modelos para una decoración contemporánea.
En cuanto al acabado exterior, lo recomendable es un color neutro. Recuerda: el objetivo es iluminar un foco de atención, no que el foco de atención sea la propia lámpara! Los acabados cromados o metálicos mejor utilizarlos en superficies de madera o en cuartos de baño.
También es posible usar lentes difusoras que difuminan los arcos o círculos de luz de la lámpara sobre la pared.
Por otra parte, el ángulo de rotación de la lámpara debe ser máximo (35º o más) para darte la mayor flexibilidad.
Finalmente, conviene elegir un transformador de calidad, ya que éste es una pieza esencial del equipamiento. Un buen transformador alargará la vida de las bombillas.
Un consejo final: menos es más. Es decir, utiliza sólo el número de downlights que necesites. Si instalas más lámparas de la cuenta, gastarás energía inútilmente y reducirás su impacto en la iluminación.
One Comment
Pingback: